domingo, 8 de septiembre de 2019

Restaurante Los Troncos

El pasado mes de Julio vi una noticia en el periódico El Día que me entristeció. El Restaurante Los Troncos ha cerrado sus puertas después de 40 años. Este restaurante ofrecía una carta excelente con productos de primera calidad, al mismo tiempo que conservaba una clientela fiel a su cocina. ¡Es una pena! No puedo imaginar la Rambla sin pensar en este restaurante.

Santa Cruz de Tenerife se está quedando sin sus restaurantes emblemáticos y, antes, se ha quedado sin algunos de sus rincones emblemáticos por culpa de la mala gestión de sus políticos y alguna mala fe de algunos vecinos, seguramente desconocidos del lugar que no han entendido la vida "santacrucera". Véase el caso de los que solicitaron hace ya algunos años el cierre de las terrazas nocturnas de la Avenida de Anaga o, más recientemente, los que pretenden que en el Carnaval no se haga ruido y, si lo hace, que lo lleven lo más lejos posible de los lugares tradicionales. Lo cierto es que Santa Cruz es una ciudad sin vida en cuanto cierra el comercio y solo se encuentran determinados puntos donde aún puede detectarse "vida humana". El tan mencionado desarrollo sostenible también contiene una línea de acción pública que es la de preservar las costumbres y tradiciones de la comunidad. A ver si nuestros políticos locales toman nota.