El otro día, felicitando a Marcos, me acordé de mis andanzas juveniles por la Romería de Tegüeste. Cuando era "pequeña" iba con mis padres. Después, fui con mis compañeros y compañeras de universidad. Era divertido. Sin embargo, me entristece ver cómo evolucionan las cosas. Leí en un periódico local que "se prohibían las chuletas" (ver enlace).
¡Qué cosas más contrapuestas: Romería y prohibición de chuletada.
Aún con estos "lares", no cabe duda que hay que cuidar las tradiciones. Este es el enlace